Por Juan Bragassi H.
En la presente columna de arte, haremos un breve recorrido por tres muestras presentes entre el sector de la bahía y el Cerro Alegre de Valparaíso, exhibiciones que agrupan los lenguajes de la pintura, la instalación y las técnicas gráficas.
Nuestro trayecto se inicia en las dos salas del piso inferior del Centro de Extensión del ministerio de las culturas, con la exposición de pinturas, titulada: “El reloj fosforescente rumbo a Pisagua”, de Vladimir Morales, trabajos donde aborda su experiencia de vida, como prisionero en Pisagua, tras el golpe de Estado de 1973. El imaginario del autor, nos entrega escenas de este viaje forzoso, cuya representación de lugares, hechos y personajes, se mueven entre una figuración realista y la abstracción, donde el color y la línea, que definen los contorno de las figuras y formas que conformas sus escenas, adquieren una mayor relevancia, por sobre la materialidad o textura de la pintura. La exhibición, más allá de su carácter documental o de registro del ejercicio de la memoria, presenta un atractivo plástico, que se inserta, en la neo figuración.
En la sala continua, se haya la muestra “Kan kan susurro de la Palma”, trabajo colectivo y multi medial, realizado por Ximena Bórquez, Fernando Godoy y Emilia Simonetti, realizados tras un estudio de campo en los sectores de los palmares de Ocoa, El Salto y Cabritería. La muestra consta de un conjunto de trabajos gráficos, algunos de ellos realizados en el lugar, donde se hace catastro de las texturas, mediante el uso de la técnica del frottage, así como del sonido presente en dichos lugares y el registro audiovisual de los sitios de estudio. También está la síntesis iconográfica del entorno natural, por medio de la serigrafía. Esta es una muestra que apela a la memoria emotiva del espectador, mediante su estímulo sensorial, aspecto que brinda un atractivo a la exhibición, que no nos deja indiferentes.
Continuando con nuestro recorrido, visitamos la sala de exposiciones “El Peral”, lugar donde está la muestra de trabajos gráficos, titulado: “En Valparaíso todas las escaleras llegan al mar”, de la profesora y artista visual Ana Barrientos, exhibición donde se aborda las manifestaciones de la fuerza de la naturaleza y de los elementos que la constituyen, con los cuales el ser humano establece una cierta relación mágica. La mencionada artista, realiza su producción por medio del uso del lenguaje del dibujo mono cromático o la pintura a la tinta. Hay trabajos de diferentes dimensiones, algunos encuadrados en el marco del cuadro, otros se despliegan ocupando el espacio de la sala. La línea y la mancha son los protagonistas, para ir conformando las figuras y formas de sus composiciones: planetas, signos de carácter simbólico, paisajes oníricos y las texturas naturales.
Escritos de Arte 